sábado, 31 de marzo de 2012

Manuel Cuenya: La fragua de Furil

Salgo de La fragua de Furil, tranco su puerta y de camino a casa me pregunto cómo definiría a Manuel Cuenya. Sí, creo que ya lo tengo:

Manuel dignifica con la palabra el legado de aquellos que calzan galochas; nos traduce lo que está escrito en las paredes de un llar; lleva a la ciudad la aspereza de las manos de un agricultor y dice: estas manos, también saben dar caricias; explica en un círculo culto literario que es un Renubeiro y que es una iguiada manteniendo vivas una cultura y una lengua; es quien abre la ventana a las fronteras para que vean un poco más allá del final de su calle; es un viajero que lleva en la mochila todo lo que vio en Dublín, en Marrakect, en México , en La Habana, en Lisboa y nos explica que buscaba en cada viaje, que no sólo lo hacía para poner una foto en facebook y decir, mira, estuve aquí y no sé muy bien por qué; baja a Ponferrada desde el útero de la Sierra de Gistredo y dice, el Bierzo Alto está ahí y tiene mucho que contar.

Sí, todo esto vi en La fragua de Furil, todo esto me contó Manuel Cuenya en su libro, que porcierto está en los kioscos, no sé que hacen todavía ahí sentados.

viernes, 23 de marzo de 2012

Tintero de tierra AGOTADO

El 23 de Abril de 2.011 presenté en mi pueblo - San Román de la Vega (León) - mi primer poemario, Tintero de tierra (Edición bilgingüe en llionés y en castellano). Hoy, 23 de Marzo de 2.012 vendí el último ejemplar.

Desde aquí quiero dar las gracias a tod@s y a cada un@ de los que hicisteis posible este viaje. Atrás quedaron presentaciones en Astorga, Ponferrada, León, Illescas, Gijón y Madrid, entrevistas en diferentes medios de comunicación, difusión a través de la red...

GRACIAS, gracias por hacer que un sueño que ni si quiera me había atrevido a soñar, sea una realidad.



jueves, 22 de marzo de 2012

Ainda: Esto no rima


Llega la primavera y aunque la falta de agua, la escasez de ideas, la poca lucidez o el agotamiento democrático no presagien un horizonte muy prístino, nada de eso puede impedir el nacimiento de las nuevas flores.

“Esto no rima” es una prueba más, contundente y luminosa, de que en los momentos de oscuridad se advierten las más claras señales. La incertidumbre es un semillero. La indignación, pese a quien le pese, etiquetas aparte, una poderosa energía que derrota la más pesada maquinaria del capital. La indignación ha sido denostada desde el poder una manera tan interesada que no por menos vieja se nos acostumbra.

“Esto no rima” es una antología de poetas e ilustradore s de todo el país, jóvenes y no tan jóvenes, mujeres y hombres, altos y bajos, rubios y morenos, vasco y andaluces, de Murcia o de Madrid que sencillamente están indignados, que se indignaron, que no han dejado de indignarse. Un grupo de creadores que unen sus voces para dar un grito contra la barbarie y el ostracismo del capitalismo imperante.

Entre ellos tengo la suerte de encontrarme y a través de la Editorial Origami, sale a la luz este mes este proyecto que nace sin ánimo de lucro y con ánimo de lucha. Ya no vale la resignación.

Este es el enlace de la editorial y del libro:


martes, 20 de marzo de 2012

Esto no rima: Antología de poesía indignada


Esto no rima (Editorial Origami)

Sí, este proyecto nació en junio del año pasado, yo tenía unas ganas enormes de usar la poesía como arma de defensa y de ataque, sobre todo, de ataque. Las plazas de España se habían llenado de hombres y mujeres pidiendo el fin de este sistema, de esta injusticia, de esta realidad en la que cada día aumenta el número de pobres en nuestras calles, el número de parados, la falta de medios en los colegios e institutos públicos, en los centros sanitarios, etc. Pero sobre todo, aumenta el miedo, miedo a perder el empleo, miedo al engaño, miedo al futuro.

Queriendo denunciar esta situación empecé a enviar correos electrónicos a personas con ganas de usar esa misma poesía contra la injusticia, la que a día de hoy, sigue impune. La respuesta fue rápida y masiva, en tres semanas sumábamos 45 personas dispuestas a plasmar sobre el papel nuestro rechazo a este progreso. A finales de verano un prologuista puso el broche final a estas ganas de contar, a esta rebelión de las palabras, a este hasta aquí nuestra capacidad de sumisión y de silencio, ni un paso más. Ahora, nos toca a nosotros.

Entrados en el año 2.012, una editorial nos abrió sus puertas y dos meses después puso ese libro en la calle. Trabajo, mucho trabajo, pero es nuestra obligación moral, no nos podíamos permitir una derrota más.

Hoy ese libro empieza a estar en las calles; hoy, cuando el número de indultos a culpables aumenta, cuando las cifras del paro guillotinan nuestra juventud, cuando el sistema electoral cerró las puertas al voto “uno es uno” y a unas listas con las puertas abiertas, cuando la constitución fue ultrajada con nocturnidad y alevosía, cuando la impunidad de aquellos padres de la democracia se ríe a nuestra cara, hoy, empezamos a recitar justo lo que no quieren oír.

Estas palabras escribí en uno de mis poemas:

Pintamos llibros nas paredes,
recitamos democracia nel suelu,
exercemos el derechu de participar
gritamos la obligación de nun callar

Pintamos libros en las paredes
recitamos democracia en el suelo
ejercemos el derecho de participar
gritamos la obligación de no callar

Es hora de continuar con lo que acaba de empezar, es la hora de la dignidad de la palabra, es hora de Esto no rima


Libro solidario. Los derechos de autoría de los participantes así como del antólogo y un porcentaje de la editorial, se destinan a beneficio del Comedor Social Paris 365 de Pamplona

Antólogo:
Abel Aparicio

Prólogo:
Isaac Rosa

Poetas e ilustradores:
Gsus Bonilla
Casilda García Archilla
Velpister
Adrian Arias
Ana Pérez Cañamares
Abel Aparicio
Esteban Gutierrez Gómez
Sofía Castañón
Ainda
Alfonso Xen Rabanal
Roxana Popelka
José Naveiras
Viktor Gomez
Ángel Petisme
Francisco M. Ortega Palomares
Cristina Morano
Héctor Castilla
Ricardo Bórnez
Alberto García-Teresa
Felipe Zapico
Manuel Ferrero
José Manuel Vara
Jorge Espina
Toño Morala
Francis Vaz
Emilio Gancedo
Sergio C. Fanjul
Alberto Flecha
Vicente Muñoz Álvarez
Ángel González González
Miguel Ángel García Argüez
José Daniel Espejo
Ángel Guinda
Pepe Ramos
Miguel Ángel Gara
Fran Allegre
Diana García Bujarrabal
Carlos Salem
Antonio Díez
Beltrán Laguna
Javi Das
Marcos Ana
David González
Jorge Riechmann
Carlos Huerta


http://www.editorialorigami.com

miércoles, 14 de marzo de 2012

Carlos J. Domínguez: LA DEMOCRACIA


En León no hubo guerra, el ejército y el pueblo se posicionaron desde el primer día a favor del bando nacional - es decir, el bando que dio un golpe de estado – y no hubo batallas, si eso, algún enfrentamiento en la montaña y algún maqui que quedó en El Bierzo. Esto fue lo que siempre escuché, además de la lindeza de que la guerra era insalvable, vamos, que tenía que llegar - os lo juro, eso escuché – porque no había otra solución, total, para que los votos, para que la democracia pudiendo imponer a base de tiros en la nuca y bombardeando ciudades.

Insisto y, no por repetido deja de ser importante, nadie en el colegio me explicó quien era Miguel Castaño y porqué se le asesinó, nadie en el instituto me explicó quien era El Cesterín y porqué se le asesino, quien era Juan García Arias y porqué se le asesino. “Los libros de historia de Catalunya están manipulados y cuentan esta según les conviene, lo mismo que en Euskadi y Galicia”. Si, supongo que os suena. Señoras y señores, ¿Hablamos de los libros de historia del resto de España?, ¿Hablamos de los libros de historia de este simulacro de Comunidad Autónoma llamado Castilla y León? No entiendo porqué un alumno leonés no sabe quien era su alcalde, porqué fue asesinado sin delito alguno, simplemente por pertenecer a un partido político y tener una ideología distinta a los militares que dieron ese golpe de estado. Sí, pero los otros también hicieron los suyo, ¿Qué hizo Miguel Castaño?, ¿Qué hizo Ramiro Armesto Armesto?, ¿Qué hizo Emilio Francés Ortiz de Eleguea?

Sigo sin entender porque en la Plaza Don Gutierre no se explica que allí estaba la sede de un periódico que tenia por nombre La Democracia y que el Gobierno Franquista robó a la familia de Miguel Castaño, sigo sin entender porque en los institutos de la Región leonesa no se dice claramente que San Marcos fue un campo de concentración, sigo sin entender porque no se explica que la actual Avenida Miguel Castaño lleva ese nombre porque fue por donde pasó Miguel Castaño en camión junto a sus compañeros camino del paredón, donde hoy ni una triste placa indica lo que allí ocurrió. Pero lo que más triste me parece de todo esto, es que el partido al que perteneció Castaño, el PSOE, no haya movido ni un dedo para que los compañeros de Castaño dejen de estar llenando las cunetas de este país y por fin tengan un entierro digno. Miles de familias siguen queriendo recuperar esos restos y el partido al que perteneció Miguel Castaño nada hizo cuando estuvo en el poder, del PP ya ni opino, demasiado salvaje tener como Presidente-fundador hasta su muerte a Manuel Fraga, que murió sin condenar el Franquismo. Igual el PSOE comparte opinión con Marcelino Camacho, ese gran líder de CCOO (nótese la ironía) cuando afirmo que ellos ya tenían enterrados a sus muertos (tantas heridas tenemos, tanto hemos sufrido, que hemos enterrado a nuestros muertos y nuestros rencores”). Que opinarán las familias que tienen a sindicalistas y a socialistas en las cunetas de todo esto...

Muchas de estas preguntas y algunas respuestas me hice y hallé cuando leí Asesinaron LA DEMOCRACIA, Autopsia a Miguel Castaño, alcalde y periodista represaliado, en lo que para mí es un muy buen libro escrito por Carlos J. Domínguez, un libro que se presentó en el Parador San Marcos, ese mismo lugar que fue un campo de concentración utilizado por los militares que dieron un golpe de estado, si, los del bando nacional.

Lectura muy recomendable, ya seas leonés, andaluz o guatemalteco. La historia es necesaria para saber de dónde venimos y para no cometer los mismos errores. Gracias Carlos J. por acercarnos parte de nuestra historia.


lunes, 12 de marzo de 2012

De ruta con Abelius a: Ourense (Territorio Suave)


Creo que con 13 años empecé a escuchar a Los Suaves, la cinta doble del álbum “¿Hay alguien ahí?” en un radiocasete, que mientras trabajaba con mi padre, me acompañó muchas horas. Este mes junto a Alicia, Juan y Ana conocí la vecina provincia Gallega.

Llegamos el viernes por la noche después de un viaje con la compañía de lluvia y niebla mientras pasábamos por O Barco, A Rua, Monforte de Lemos y por la Ribeira Sacra. Al llegar a Ourense posamos las cosas y nos fuimos a cenar, a recorrer parte del casco viejo y a tomar algo.

Al día siguiente conocí el centro de Ourense. Lo que más me sorprendió fueron unas termas en el centro, en pleno Invierno gente dándose un baño, aunque sobre esto hablaré más adelante. La Catedral, la plaza del ayuntamiento, el puente romano sobre el rio Miño (dicen en León que el Sil lleva el agua y el Miño la fama) y la Praza os Suaves, donde me hice varias fotos en las placas que hay en la plaza, donde se puede leer “POEMAS DO AMOR, DO DESENCANTO E DA VIDA, QUE DENDE OURENSE COMPUXERON ROCK PARA TODO O MUNDO”. Despues de esto a comer entre otras cosas, un rico caldo gallego.


Ya por la tarde fuimos a las termas, situadas a la orilla del rio Miño. Nosotros elegimos las de Outariz. Bañarse el 10 de Diciembre al lado del Miño mientras se pone el Sol es algo realmente peculiar. Un gran atractivo turístico para la zona. Destacar que gran parte de estas termas son totalmente gratuitas. La vuelta al hotel fue caminando, un buen paseo de unos 6 km.

Por la noche fuimos a tomar unos vinos – Mencias, ya que estábamos en la tierra de ese vino - por una ciudad desierta. La verdad es que el Real Madrid y el F.C. Barcelona se podían enfrentar todos los fines de semana, así no habría tanto agobio en los bares. Vinos y pinchos gallegos, una buena mezcla.
Una vez acabado el partido del circo, perdón, del siglo o como lo quieran llamar - Los romanos y Franco entre otros sembraron buena semilla y nosotros estamos mejorando el producto, que patético- la ciudad se llenó de gente y nosotros fuimos al FAR, bar de Los Suaves, donde pedí la canción Palabras para Julia – letra de un poema de Goytisolo- y una cerveza.

El domingo fuimos a Allariz, un pueblo interesante, con parte de muralla mandada construir por el rey leonés Alfonso VI, edificios antiguos y un rio, el Arnoia, con varios molinos. En uno de ellos comimos, empanada de Zorza y cordeiro o forno, ¡Que maravilla!


Y eso fue todo, una vez más, muy buena compañía, buena ciudad, buena comida, buenos vinos…

¡Nos vemos en la siguiente!




http://creaturafanzinedigital.blogspot.com

domingo, 4 de marzo de 2012

Foncebadón, una Fervencia en el Camino


ABEL APARICIO GONZÁLEZ
04/03/2012

Son muchas las veces que escucho decir «Este fin de semana estuve en la Cascada de la Fervencia», o veo escrito en carteles oficiales, periódicos o en internet «Cascada de la Fervencia». Hasta hace poco tiempo desconocía que fervencia fuese una palabra propia del leonés, cuya traducción al castellano es cascada. Por lo que, al decir «Cascada de la Fervencia», estaríamos diciendo «Cascada de la Cascada».

Esta forma de redundancia toponímica no es nueva, y ocurre de manera natural cuando los hablantes dejan de conocer el significado de una palabra. Para referirse a lo mismo, pasan a emplear otra voz con idéntico significado, que en ocasiones se añade a la anterior. Pero este no sería el caso, ya que los habitantes de Foncebadón sí conocen el significado de la palabra fervencia. Aquí el problema radica en que a causa de la desprotección y del nulo estudio por parte de los organismos oficiales de toda una lengua —en este caso la leonesa— y de la toponimia en ella fraguada, a la hora de poner carteles o imprimir mapas no se consulta a los habitantes de cada zona, que son los depositarios de un conocimiento secular del territorio.

Intrigado con el asunto de la toponimia de Foncebadón a raíz de conocer que fervencia es leonés, hace un año encuesté a los tíos de un amigo. Sus nombres son Avelino y Benita Serafín, ambos naturales de Foncebadón. Avelino estuvo viviendo en el pueblo hasta los 32 años y ella emigró más joven, a los 16. Estas Navidades decidí acabar el trabajo que había empezado y me acerqué de nuevo a su casa de Astorga para que me dijesen el nombre del resto de las zonas de Foncebadón que en la primera entrevista no anoté.

Cuando llegó el momento de referirse a la fervencia, lo que escuché en palabras de Avelino fue esto: «Aquí siempre se sintió decir El Pozo la Fervencia, no sé de dónde sacan ahora lo de llamarle «Cascada de la Fervencia», mientras su hermana asentía.

Pero no sólo eso: Avelino y Benita me dijeron el nombre de más de cien zonas en las que se divide su pueblo, la inmensa mayoría de las cuales sigue manteniendo su topónimo en leonés. Claros ejemplos de ello son El Prao de la Lloba (de la loba), El Prao del Vieyo (del viejo), Las Llameras de la Fuente (llama o llamera en leonés es una zona húmeda, generalmente de prados), Las Tierras del Espantayu (espantajo, espantapájaros), L’Acebal (lugar donde hay acebos), La Mata las Artigas (artiga, terreno que se gana al monte quemándolo y rompiéndolo), El Reguero las Muévedas (muéveda, desprendimiento o avalancha de nieve), La Degullada (collada o paso entre dos alturas), Las Tierras de la Chanada (una chana o chanada es una zona llana), más un largo etcétera.

Seguí hablando con ellos sobre los pueblos de alrededor y los largos paseos que daban cuando vivían por allí, como por ejemplo Mataveneiro (Matavenero), Villaciervos (Villar de Ciervos) o Funfría (Fonfría).

Como pueden ver, preguntando por estos nombres, podemos conocer por qué a una zona se le llama de una forma determinada. Ahí, entre otras muchas, radica la importancia de conocer una lengua, con sus características y rasgos, alejados de intereses políticos que no dejan de ser efímeros. Conociendo un poco la lengua leonesa, conoceremos un poco más la tierra que pisamos y lo que de ella se escribe, así como muchas de las palabras que usan nuestros abuelos, tíos, padres y, aunque no nos demos cuenta, nosotros mismos, al utilizar términos como falispas de nieve, arramar, manzana roya, filandón, o nombres de pueblos como Fontoria de Cepeda (Fontoria, fuente de oro) o Braña (pasto o prado alto).

La lengua sirve para eso, para entendernos con nuestros semejantes y para entender a nuestros semejantes. No queramos destruir lo que fue nuestro durante tanto tiempo y que hoy, aunque en mucha menor medida, podemos seguir viendo, como por ejemplo, cada vez que nos acerquemos a Foncebadón y a su pozo, donde podemos observar una preciosa fervencia.

(El significado de estas palabras y de otras muchas, me lo facilitó Fernando Álvarez-Balbuena, lingüista y profesor de la Universidad de Oviedo).