Ayer en el Senado pudimos “disfrutar” de un auténtico circo (y perdón para los payasos). Con cánticos de unos, Zapatero dimisión, Zapatero dimisión mientas daban golpes a las mesas. Con cánticos de los otros, Gurtel, Gurtel y más golpes a las mesas.
De todo ese circo, me quedo con las palabras de su presidente, Javier Rojo: "Los ciudadanos quieren soluciones y nosotros les estamos ofreciendo una imagen lamentable".
Si señores políticos, aunque no lo vean, en este país hay alrededor de cinco millones de parados, familias que tienen que hacer magia para llegar a fin de mes, gente sin coches oficiales, sin sueldos vitalicios, sin secretarios del secretario del concejal de obras públicas, y hasta a veces, señores políticos, sin algo que ponerles en el plato a los hijos. Piensen por un momento, qué pensarán cuando ponen la televisión-manipulación y ven tan patético acontecimiento. Solo espero, que en las próximas elecciones, el 100% de los votos, vayan en blanco.
En fin, que nunca había sentido tanto la canción de Evaristo como ayer:
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